• Más de un centenar de locales, tanto históricos como actuales, participarán, del 14 de junio al 17 de julio, en La Ruta 140 Madrid, un itinerario gastronómico por todos los distritos de la capital para celebrar el 140 aniversario de la asociación
• Los locales participantes ofrecerán una receta icónica, con la que comenzaron su andadura, y el actual plato estrella de la carta: por ejemplos, los regalitos de toro de El Anciano Rey de los Vinos o los ‘manolinis’ de Manolo 1934, unos originales raviolis
• HOSTELERÍA MADRID se encuentra volcada en un intenso programa de actividades para conmemorar su fundación, que se extenderá el resto del año e incluirá dos exposiciones y unos premios a los profesionales más destacados del sector

HOSTELERÍA MADRID, la asociación de referencia de los empresarios hosteleros de la región, celebra su 140 aniversario con La Ruta 140 Madrid, un recorrido culinario con locales de los 21 distritos de ciudad, con el que quieren que los madrileños y los visitantes conozcan las interesantes propuestas gastronómicas que hay en todo Madrid, más allá del circuito tradicional o del que se pone de moda en función del momento. Los más de cien locales participantes ofrecerán, del 14 de junio al 17 de julio, el plato con el que arrancaron su andadura y aquel que, en la actualidad, tiene más éxito entre su clientela. De esta manera, explican desde HOSTELERÍA MADRID, los negocios podrán contar al público cuál es su historia, darle a conocer sus orígenes y también su evolución.

UNA RUTA PARA COMERSE MADRIDAunque la ruta se extiende durante más de un mes, la iniciativa se activará cada semana en un conjunto de distritos. Así, del 14 al 19 de junio, la ruta se desarrollará en Centro, Arganzuela, Carabanchel y Chamartín; del 20 al 26 de junio, en Salamanca, Chamberí, Hortaleza y Latina; del 27 de junio al 3 de julio, será el turno de Retiro, Ciudad Lineal, Fuencarral,

Moncloa-Aravaca y San Blas-Canillejas. Puente Vallecas, Villa de Vallecas, Tetuán y Usera tendrán el itinerario activo del 4 al 10 de julio, mientras que del 11 al 17 de julio, será el turno de Moratalaz, Barajas, Vicálvaro y Villaverde.

PLATOS DELICIOSOS Y UNA WEB DE GASTROCULTURAL

En La Ruta 140 Madrid participan algunos locales muy conocidos en la capital, con una trayectoria dilatada. Docamar, templo de las bravas de Madrid (ubicado en el distrito Ciudad Lineal) participa en el recorrido gastro con dos platos para dar a conocer su carta, en la que hay muchas más cosas aparte de las archiconocidas patatas: un risotto de hongos con tomate seco y rúcula es la propuesta de origen, y unos raviolis artesanales negros rellenos de portobello y wakame con su salsa casera y polvo de espirulina hacen un guiño al porvenir. El Anciano Rey de los Vinos, taberna del centro inaugurada en 1909, ofrecerá a todos aquellos que pasen por su preciosa barra los regalitos de torito, un plato tradicional que se servía en la taberna, pero con una receta renovada: rabo de toro envuelto en pasta filo con salsa y pimiento de piquillo. Por su parte, Manolo 1934, imprescindible de la mejor cocina tradicional, reivindica sus callos a la madrileña y servirá, como sugerencia, los manolinis, unos curiosos raviolis caseros rellenos de cocido, mientras que Casa Pedro participa con sus sardinas escabechadas. También participan muchos locales más modernos, como La Berenjena, que se lleva a la cita sus chips de berenjena con salmorejo; Níquel, que servirá su gilda niquelada a base de, atún, piparra, anchoa y aceituna o La Caníbal, que presumirá de sus torreznos ibéricos con base de kimchi.

La Ruta 140 Madrid también quiere ser un espacio de divulgación de la historia gastronómica de la capital. Por ello, HOSTELERÍA MADRID ha preparado una web en la que explica el devenir culinario de cada distrito, y en la que se puede consultar el listado de participantes y un mapa con los locales.

Para José Antonio Aparicio, presidente de HOSTELERÍA MADRID, «los verdaderos protagonistas de este aniversario son nuestros hosteleros, y queremos que ellos sean los que cuenten su historia como mejor saben: ofreciendo sus mejores platos para que la gente conozca cómo empezaron, entienda la evolución de su cocina y sepa cómo afrontan el futuro. Nuestro deseo es que toda la ciudad se implique y que los madrileños y los turistas se animen a conocer otros distritos y zonas, más allá de los circuitos de moda o tradicionales. Se puede contar la historia de la ciudad también a través de sus negocios hosteleros. El crisol de gastronomías de Vallecas o Tetuán, el refinamiento de Salamanca, los estupendos locales de cocina andaluza de San Blas-Canillejas… los bares y restaurantes son testigos, y resultado, de este devenir maravilloso de la ciudad, que siempre va de la mano de sus gastronomías. Porque Madrid también es plural en esto».